Todo es vida

Empieza el curso escolar y también el regreso no solo de los estudiantes a las aulas, sino también de sus padres a los puestos de trabajo tras las vacaciones de verano de la mayoría de las personas en nuestro país.

A muchos, entrar en la rutina laboral después del periodo de vacaciones les produce el llamado “síndrome post-vacacional”, que se manifiesta habitualmente con cierto desánimo y falta de motivación, irritabilidad, insomnio los días previos a la reincorporación, problemas estomacales, cuadros de ansiedad, temor, angustia, inquietud, inseguridad, etc. Suele desaparecer a las pocas semanas y/o días al regularizar los horarios de trabajo y descanso.

En época de COVID, muchas cosas han cambiado, incluso la vuelta al trabajo. Según un estudio elaborado por Grass Roots, el 67% de los trabajadores están contentos con su “vuelta al ruedo” y se siente optimista por tener un empleo estable durante esta época de crisis.
En realidad, el síndrome post-vacacional es una pequeña crisis de adaptación que puede superarse con hábitos ordenados y un reencuentro con las motivaciones profundas. Es cuestión de actitud y mentalizarse de que también se puede ser feliz trabajando.

¿CÓMO ENCONTRAR EL EQUILIBRIO ENTRE EL TRABAJO Y LA VIDA FAMILIAR?

Quiero que reflexiones sobre esto: no existe tal cosa entre el trabajo y la vida, todo es vida.

Cuando te esfuerzas constantemente en crear lo que te interesa, nunca desearás un descanso.

No hagas esta demarcación de que hay algo llamado trabajo y otra cosa llamada vida. La vida consta de diferentes aspectos y tienes que aprender a lidiar con ellos.

La distinción entre el trabajo y lo que se considera diversión o placer está demasiado marcada en la sociedad actual. Esto se debe principalmente a que la gente está ‘sufriendo’ su trabajo. Aquel que conoce la alegría de la actividad no querrá un descanso. Obviamente, el cuerpo físico necesita descansar y evadirse, pero no debemos centrar toda nuestra energía en hacerlo sólo en el periodo estival.

Parece que estamos muertos de lunes a viernes durante todo el año y que sólo se vive los fines de semana y/o en periodo de vacaciones. Debes vivir los siete días de la semana, los 365 días al año. Enamorarte de tu trabajo, sea el que sea, y compaginarlo con actividades agradables y socialización todas las semanas. Y sí, también en época de COVID.

La gente está tratando de dividir su vida de forma que el trabajo sea algo que haces sólo por dinero y la familia es algo que se hace para llegar a niveles más profundos. En verdad, no importa cuánto dinero ganes si encuentras que tu entorno, pareja o hijos no se sienten orgullosos de ti y de lo que haces. Deseamos que la gente se sienta conmovida por la actividad que realizamos.

Algo que podemos hacer es tener conversaciones familiares sobre los temas que llevamos en nuestro trabajo. Esto crea un nivel de confianza completamente diferente y no sabes qué ideas y observaciones pueden surgir de tu familia. Ellos son observadores externos de tu trabajo, personas en las que confías, te quieren y desean que tengas éxito. Su aportación puede ser extremadamente valiosa. Puede ser tu pareja o tu hijo de cinco años, no hay problema.

Sé que es habitual que tratemos de mantener las conversaciones de trabajo lejos de la familia, pero yo diría que eso es un error. ¿Por qué, si estás creando algo, las conversaciones de trabajo no pueden ser interesantes? La familia podría involucrarse en ello, y cuando estás en casa, aunque no estés trabajando, podrías seguir pensando y desarrollando ideas para el mañana o para el futuro de una forma agradable.

El trabajo forma parte de tu vida, también es tu vida, ¿por qué no normalizar las conversaciones sobre ello? Así se comparte el peso y ayuda a que todos remen en la misma dirección, sin secretos, con honestidad y con plena confianza.

Por lo tanto, siempre debes evaluarte a ti mismo en términos de lo que se te pida que hagas. ¿Cuál es el nivel de responsabilidad que tengo? ¿Cuál es la oportunidad de crear algo que realmente valga la pena, tanto para ti como para todos los que te rodean? Cualquier trabajo que hagas en el mundo valdrá la pena si eres capaz de alumbrar la vida de los demás profundamente.

Las terapias de Tercera Generación nos aportan un marco muy diferente al que estamos acostumbrados. No dudes en pedir cita con un profesional si consideras que estos síntomas se prolongan en el tiempo o se vuelven incontrolables.

Leticia Martínez Val.
Psicóloga Sanitaria Nº Col: A-2563